Honda Motor comenzó esta semana con una declaración de que todos los vehículos diésel se eliminarán gradualmente en Europa para 2021. En cambio, la compañía espera comenzar a ofrecer modelos con propulsión eléctrica. Es parte de un plan para electrificar toda la gama europea de Honda para 2025.
A largo plazo, Honda planea aumentar la proporción de vehículos eléctricos, incluidos los modelos de batería, a dos tercios de la producción total para 2030. A modo de comparación: ahora esta cifra no supera el 10%.
En Europa, se están endureciendo los requisitos para las emisiones de dióxido de carbono. Para el año que viene, las emisiones deberían reducirse a 95 g / km para el 95% de los vehículos, desde el promedio actual de 120,5 g / km.
Las regulaciones más estrictas han ensombrecido las perspectivas de producción europea de Honda. En febrero, el tercer fabricante japonés más grande dijo que cerraría su única planta de automóviles en el Reino Unido en 2021, lo que provocaría la pérdida de 3.500 puestos de trabajo. Además, el plan es reducir el número de variantes de modelos de automóviles a un tercio de los actuales, lo que reducirá los costos de producción en un 10%. Los fondos liberados se utilizarán para investigación y desarrollo avanzados.